Experiencia:

      Paso a relatar mi experiencia personal ocurrida ,el otro día ,al actuar de forma totalmente contraria a mi forma de ser.                                                                                             

      Fue cuanto menos curioso, toda una vida  de forma determinada y de buenas a primeras, actuar, durante todo un día, digamos , lo que se me ocurre llamar “actuación contracorriente”.No digo yo que siempre haya sido correcta en todo, tan solo tengo mi propia forma de actuar, de ver las cosas, de actuar en consecuencia,en definitiva, lo que vulgarmente se dice: “soy como soy” y así me siento bien.Se me ocurre un símil para definir la situación; estuve escribiendo con la mano izquierda, así me sentí;incómoda, obligada,fuera de mí.

    El día comenzó, poniendo en orden, o más bien, intentándolo porque de ninguna manera suelo serlo, en mi habitación con mis cosas.Muy atareada estuve, me tuve que levantar un rato antes, todo ello para que me diera tiempo a hacer la cama, recoger mis cosas, para que todo quedara impecable y ordenado, trabajosa tarea, sí. Mi madre extrañada, ya me decía con asombro…¿qué te pasa?no pareces la misma¿es esto un trabajo de clase?ya lo sospechaba, tú no eres así.

    Llegué a clase, de entrada no saludé a nadie, me mostré fría y distante, no participé en ninguna conversación de esas sin transcendencia que habitualmente mantenemos, en una palabra, me aislé, no contaba, estaba, pero como si no estuviera, quedé sin contacto humano, sin compartir nada, me sentí aíslada, insolidaria, sin querer saber nada de nadie.

    Al llegar a casa, me propuse durante un rato, evitar hacer los deberes de clase,me sentía bastante mal, me siento bien cuando cumplo con mis obligaciones.

   Finalmente,tengo que decir que esta experiencia me ha servido para conocerme mejor a mí misma, a ser más consciente de mi auténtica forma de ser.